Luego de un día caluroso y atareado a muchos de nosotros nos gustaría llegar a casa y encontrar algo refrescante en la nevera, ¿no es así? ¿Qué tal un helado de limón?
Sé que te encanto la idea; adelantémonos a nuestros propios antojos y dejemos el escenario listo para poder disfrutar ese merecido descanso con un rico HELADO DE LIMÓN. ¡No podrás creer lo fácil que es!
Ingredientes
- 400 ml de nata para montar o chantillí
- 250 gramos de leche condensada
- 100 gramos de azúcar glass o azúcar pulverizada
- 100 mililitros de zumo de limón
- Ralladura de limón
Preparación
En un bowl grande coloca la nata para batir y con la ayuda de un batidor eléctrico o de mano, mezcla hasta que tome una consistencia espumosa, elevada, lo que se conoce como MONTAR. Luego agrega el azúcar glass y continúa mezclando.
Cuando ya la nata tenga una consistencia cremosa, agrega la leche condensada e integra.
Una vez listo, continúa batiendo y agrega el zumo de limón poco a poco. Agrega la ralladura de limón y simplemente integra.
Delicioso Brownie con helado de vainilla. Fácil preparación
Puedes servir tu mezcla de helado en vasos, gaveras, o moldes (como prefieras, aunque si lo tienes en vasos sería mucho más práctico, pues lo tomarías de paso a tu habitación y no tendrías que lavar la cuchara de helado luego… Solo son ideas).
Luego solo debes dejarlo de 6 a 12 horas en el refrigerador están listos, y puedes comenzar a degustar tus ricos y sencillos helados de limón.
¿Te gustan los cítricos? ¿Pensaste en naranjas quizás? O ¿Fresas… Moras… Parchitas? No te limites, puedes aplicar la misma técnica con la fruta que prefieras y seguramente te irá bien.
BONUS
En el momento en que integras la ralladura de limón, puedes dejar explotar tu creatividad. ¿Te matan las gotas de chocolate, las galletas, o el sirope? ¡El mundo es tuyo! ¡Agrega lo que quieras!
¿Se te acabo el dinero, pero deliras por un sirope? Está bien, te enseñaremos a hacerlo con ingredientes que probablemente están en tu casa:
Toma el zumo de la fruta con la que deseas hacer el sirope (cualquier fruta cítrica le quedaría bien a este helado; también podrías hacerlo de limón y así asegurarte de realzar ese sabor).
Agrega el zumo de (inserte aquí el nombre de la fruta que quieres) a una olla y azúcar morena (unas dos o tres cucharadas) y mientras este hierve, coloca un chorrito de vainilla y un poco de cáscara de limón (si te gustan las hierbas, también puedes agregarlas en este punto, como la canela, el anís, la menta, la hierbabuena, el jengibre o la cúrcuma). Deja que hierva y mezcla ocasionalmente. El proceso te tomará entre 15 y 20 minutos (lo sabrás por la textura) y una vez listo y con la ayuda de un colador, simplemente viértelo en el recipiente donde lo vas a conservar.
Puedes agregar el sirope antes de servir la mezcla en los vasos (cubriendo con lineas la superficie, por ejemplo), o puedes agregarlo a la mezcla. Si prefieres cubrir tu helado cada vez que lo sirves, también sería muy gustoso. Tú eliges, ¡eres libre!
Ustedes me agradan tanto que incluso les compartiré un secreto: la vainilla se agrega en muy pequeñas cantidades porque tiene la cualidad de potenciar sabores enormemente, no descartes la idea. También puedes jugar con tus especies, hierbas o raíces preferidas (¿la menta o el jengibre quizás?). Lo amarás y también contribuirá a tu salud, ¡dos pájaros de un solo tiro!