Un merengue parece un reto de competencia para determinar si eres apto o no en la cocina. Debo admitir que causa mucha curiosidad y muchos suelen tirar la toalla después del primer o del segundo intento. Nosotros no dejaremos que eso pase, pues hoy te enseñaremos paso a paso todos los detalles que se necesitan para hacer un merengue perfecto.
No entres en tensión, realmente no es tan difícil; si cumples con ciertos pasos que te detallaremos, comenzaras a hacer tu propio merengue y seguramente, el mundo de los postres se abrirá ante tus ojos.
¡Bienvenido y Disfruta el proceso!
INGREDIENTES

- 330 gramos de claras de huevo
- 2 ½ tazas de azúcar
- ½ cucharadita de Cremor tártaro (opcional)
- 1 cucharadita de vainilla (opcional)
- Colorante de alimentos (opcional)
- Sal
PREPARACION INICIAL
- Agrega las claras en el bowl de una batidora (si puedes elegir, que sea de un material resistente al calor, sino agrégalo en uno que sí lo sea y luego transfieres a la baidora). Esa batidora debe estar totalmente limpia y seca. Las claras por su parte, debes estar completamente libre de yemas (Importante). Ahora agrega el azúcar
- Coloca tu bowl en un baño maría. Mezcla constantemente hasta que el azúcar se disuelva. Ojo, que no esté muy caliente u obtendrás huevos resueltos dulces y no queremos eso. La temperatura que debe alcanzar es de 50°C
- Lleva tu mezcla al a batidora y mezcla a velocidad media-baja. Cuando notes que ya se encuentra de color blanco, agrega el crémor tártaro o el sustituto de tu elección
- Cuando ya alcances el punto de nieve, sube la velocidad por unos 5 u 8 segundos, pues así activarás los componentes de crémor tártaro e incorporaras más aire, y obtendrás un mayor volumen en tu merengue.
- Sabrás que todo salió bien cuando levantes el batidor y notes el punto de nieve inmovible y brillante.

TIPOS DE MERENGUE
Para cultura general, repasemos cuales son los tipos de merengue que existen y qué los distingue.
Existen tres tipos de merengue: el italiano, el francés y el suizo; aunque todos se realizan con los mismos dos ingredientes esenciales, a saber, las claras y el azúcar, todos se distinguen por su “apellido” y su método de preparación.
El ITALIANO se prepara a partir de un almíbar que se maneja entre temperaturas de 118° y 120°C. Este almíbar se agrega en forma de hilo (“hilo” se refiere a agregarlo pausada y consistentemente) sobre las claras ya levantadas sin dejar de batir ni un segundo. Es una preparación bastante consistente y cremosa, incluso con ella se hacen flores y suelen utilizarse para decoraciones. Cuidado con la temperatura, este tipo de merengue es delicado.
El merengue va perfecto con una torta tres leches. Aquí te enseñamos a realizarla
El merengue FRANCÉS, se le conoce también como merengue básico y para él solo necesitas TRABAJARLO. Se realiza directamente con claras y azúcar y se logra mezclando ambos ingredientes hasta que se logra la incorporación de suficiente aire como para formar las burbujas que eventualmente se transforman en merengue. Generalmente este tipo de merengue suele “bajarse” con el paso del tiempo, por lo que generalmente se lleva al horno a baja temperatura con el fin de secarlo. También puede ser consumido directamente si no supone parte de una preparación que debe reservarse
Y, por último, el merengue SUIZO, el cual se consigue al llevar las claras a baño maría o a juego directo. Si se usa el primer método (como en la preparación que te mostramos) puedes mezclar un poco y luego con la batidora llevarlo a punto de nieve, PERO si lo colocas a fuego directo, debes vigilar la temperatura y NO dejar de batir, pues de nuevo, puedes terminar con unos huevos revueltos dulces.
Aunque la batidora hace el trabajo más fácil y rápido, puedes conseguir el mismo resultado con un batidor de globo o batidor de mano. No te preocupes por esa inversión para esta preparación.
AHORA SI, ¿quieres aprender a hacer merenguitos o suspiros? Te enseñaremos cómo.
Precalienta tu horno a 80°C, busca una bandeja o rejilla y coloca sobre ella papel encerado o de horno y toma una manga pastelera. ¿Listo?
-Toma la manga pastelera y en el extremo cerrado coloca la punta que deseas usar (recomendables: Boquilla IM de Wilton -6 puntas- y 863 de Ateco -12 puntas-)
-Sobre la rejilla y con la ayuda de tu manga comenzarás a hacer tus suspiros. Dado que tienes dos boquillas te enseñaremos dos presentaciones.
1-La manga que tiene la boquilla de 6 puntas, colócala totalmente perpendicular a la rejilla y presiónala ligeramente mientras la levantas. Reconocerás la forma de inmediato

2-Con la manga que tiene la boquilla de 12 puntas, también colócala perpendicularmente sobre la rejilla, pero ahora incorpora pequeños movimientos circulares, simulando un remolino. De inmediato notaras una forma de rosa.

-Llévalo al horno por 1 hora 45 minutos aproximadamente y ¡estarán listos!
Puedes usarlo para mesas de dulce, meriendas, regalos para pequeños cotillones o como decoración para tortas. Te encantarán. ¡Inténtalos y nos cuentas qué pasó!
¿Quieres hacer el paso a paso con alguien? Esta chica te lo explica todo.