La mermelada de damasco es una opción nutritiva y sabrosa que puede complementar nuestros desayunos, meriendas o aperitivos antes de la cena. El damasco, también conocido como albaricoque, es una fruta originaria de Asia que se disfruta principalmente en verano. Aunque se asemeja al durazno, se distingue por los múltiples beneficios que aporta a la salud, dado su alto contenido en minerales y vitamina A.
Hacer esta mermelada es muy fácil y no requiere mucho tiempo. El damasco resulta ser una fruta excelente para preparar mermelada, y necesitarás únicamente 3 ingredientes y un recipiente. Aquí, en RecetasGratis, te mostraremos los pasos sencillos que debes seguir para crear una deliciosa mermelada que podrás compartir con tus seres queridos. ¡Descubre cómo hacer mermelada de damascos y cuéntanos tus impresiones!
6 porciones
45m
Merienda
Dificultad baja
Ingredientes:
Cómo hacer Mermelada de damascos:
1
Lava adecuadamente los damascos, quita la cáscara y el hueso, y córtalos en 4 partes.
2
Coloca los damascos en un frasco con tapa, preferiblemente de vidrio.
3
Agrega el azúcar en el frasco junto a los damascos picados.
4
Incorpora el zumo de limón. No es necesario que el azúcar cubra todos los damascos, pero asegúrate de agitar bien el frasco una vez que estén todos los ingredientes, así conseguirás una mermelada de damascos mucho más sabrosa y concentrada.
5
Remueve todo y deja reposar durante 1 día en el refrigerador. Notarás que el jugo del damasco se mezcla con el azúcar.
6
Coloca todo el contenido del frasco en una olla y cocina la mermelada de damascos a fuego medio durante 40 minutos o hasta que adquiera la consistencia deseada. Asegúrate de remover constantemente para evitar que la mermelada se pegue a la olla.
Consejo: Si prefieres hacer mermelada de damascos sin azúcar, utiliza stevia y cocina los damascos con 100 ml de agua. Si notas que le cuesta espesar, puedes disolver una cucharada de agar-agar en agua y añadirla.
7
Vierte la mermelada lista en un frasco. Recuerda esterilizar el frasco sumergiéndolo en agua hirviendo e introduce la mermelada inmediatamente después de retirarla del fuego, mientras el recipiente aún esté caliente para evitar que se rompa. Cierra correctamente el frasco y ¡listo!
8
Deja enfriar en un lugar fresco y alejado de la luz directa del sol para mayor duración. Una vez abierto, debe guardarse en el refrigerador. ¡Ya puedes usar tu mermelada de damascos para tus desayunos o meriendas!
Si te ha gustado la receta de Mermelada de damascos, te invitamos a visitar nuestra categoría de Recetas de mermeladas. También puedes explorar una selección de las mejores recetas chilenas.
Cómo servir la mermelada de damascos
Las mermeladas ofrecen múltiples maneras de utilizarlas como acompañantes o incluso como ingrediente en alguna comida o bebida, siempre dependiendo del gusto de cada persona. Por ello, te compartimos algunas ideas sobre cómo usar tu mermelada de damascos casera, por si deseas probar nuevas combinaciones:
- Mermelada de damascos como acompañante para el pollo frito rebozado: simplemente ponla en un pequeño cuenco y disfruta de tu pollo frito untándolo con esta deliciosa mermelada, creando un contraste entre lo salado y lo dulce.
- Mermelada de damascos como ingrediente para una malteada: solo debes mezclar 2 o 3 bolas de helado de vainilla con 250 ml de leche fría y 3 cucharadas de mermelada, obteniendo una malteada con un rico sabor a damascos.
- Mermelada de damascos como salsa para carne de pollo, pavo o cerdo: en una olla, añade nata líquida al gusto y luego incorpora 3 o 4 cucharadas de mermelada, calienta la mezcla y revuelve hasta lograr una consistencia uniforme. Sirve sobre la carne que cocinaste. Esta es una forma rápida y deliciosa de resolver tus comidas.
- Mermelada de damascos como aderezo para ensaladas: mezcla 2 cucharadas de mermelada, 2 cucharadas de vinagre de manzana y un chorrito de aceite de oliva, integrando todo hasta que obtengas una mezcla homogénea que puedes verter en tu ensalada.
- Mermelada como ingrediente para helados: en una olla, mezcla 250 ml de leche, 250 ml de nata y llévalo a ebullición. Luego, agrega la mermelada al gusto, remueve, retira del fuego, bate la mezcla, colócala en un recipiente y ponla en el congelador durante 6 horas. ¡Y listo!
Esperamos que estas ideas te ayuden a aprovechar al máximo la mermelada de damascos y, al mismo tiempo, te brinden nuevas formas de acompañar o cocinar otras recetas.
Valor nutricional
(por porción)
- Calorías: 111,7 kcal
- Proteínas: 0,5 g
- Grasas: 0,2 g
- Carbohidratos: 28,5 g
- Fibra: 1,3 g
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