La tarta fraisier, también conocida como tarta de fresa, es un clásico de la repostería francesa. Este delicioso postre está repleto de fresas enteras, y lo más distintivo son las mitades de fresa que decoran el exterior de la tarta, dándole un aspecto cautivador. La receta tradicional consiste en dos capas de bizcocho genovés, rellenas de fresas y una exquisita crema muselina. Usualmente, la parte superior lleva una fina capa de mazapán rojo o merengue, siendo el mazapán la opción más popular que te presentamos hoy en RecetasGratis. Aunque la tarta no es extremadamente complicada de realizar, tiene varios pasos, así que necesitarás un poco de paciencia. El resultado es una tarta delicada que resalta la tradición de la pastelería francesa y seguramente impresionará a tus invitados.
En RecetasGratis, te enseñamos cómo hacer tarta fraisier de manera sencilla. ¡Es hora de cocinar!
6 comensales
4h
Postre
Dificultad media
Características adicionales:
Coste barato, Popular en Otoño-Invierno, Recetas al horno, Receta tradicional de Francia
Ingredientes:
Cómo hacer Tarta Fraisier:
1
Para iniciar la receta de la tarta fraisier, comienza elaborando la crema muselina. En un bol, incorpora el azúcar, las yemas de huevo y la maicena, y mezcla bien con una cuchara de madera hasta que obtengas una pasta homogénea.
2
En una cacerola, calienta la leche con la cucharada de vainilla líquida a fuego fuerte, evitando que hierva.
3
Retira del fuego la leche caliente y vierte un poco en el bol de las yemas, mezclando rápidamente para que no se cuajen. Continúa añadiendo la leche caliente poco a poco mientras bates con varillas manuales.
4
Regresa la mezcla a la olla y cocina a fuego suave, removiendo ocasionalmente, especialmente al final cuando la mezcla empiece a espesar. Cuando esté lista, vierte la crema en un bol y cúbrela con papel film, asegurando que toque la crema. Deja enfriar durante al menos 2 horas. Retira la mantequilla de la nevera para que se ablande.
Consejo: Para acelerar el proceso, puedes poner la crema en el congelador cuando esté tibia.
5
Una vez fría la crema muselina, corta la mantequilla en trozos y añádela poco a poco a la crema mientras bates con varillas eléctricas. Cuando esté bien mezclada, estará lista para usar. Si no la usas de inmediato, es mejor conservarla en la nevera.
6
Ahora, procedemos con el bizcocho para la tarta fraisier. Precalienta el horno a 180 ºC. En un bol, mezcla el azúcar, los huevos y una pizca de sal y bate bien con una batidora eléctrica. La mezcla debería espumar, ya que no se añade levadura en esta receta.
7
Agrega el aceite de girasol y continúa batiendo.
8
Tamiza la harina sobre la mezcla aireada de huevos, azúcar y aceite. Mezcla con una espátula usando movimientos envolventes para incorporar aire a la mezcla del bizcocho para la tarta fraisier.
9
Engrasa un molde de aproximadamente 20 cm de diámetro y vierte la mezcla del bizcocho. Luego, hornea a 180º C durante 40 minutos, o hasta que un cuchillo insertado salga limpio.
Consejo: Si el bizcocho se dora demasiado pronto, cúbrelo con papel de aluminio.
10
Después de hornear, si el bizcocho ha abombado un poco, usa una manopla para aplanar la parte superior mientras todavía esté caliente. Luego, desmolda y deja enfriar completamente.
11
Cuando el bizcocho esté frío, cortalo por la mitad utilizando un cuchillo afilado. Usa un molde desmontable algo más pequeño (entre 17-18 cm) para cortar las capas del bizcocho y que se ajusten perfectamente al molde.
12
Engrasa el molde desmontable y forra las paredes con papel de horno, asegurándote de que el papel sobresalga un poco por encima. Coloca la primera mitad del bizcocho en la base y asegúrate de que encaje bien. Prepara un almíbar con los 50 g de azúcar, los 50 ml de agua y la cucharada de licor, llévalo a ebullición y luego retíralo del fuego. Empapa la base del bizcocho con la mitad del almíbar.
13
Retira la crema muselina de la nevera y bate nuevamente hasta que quede cremosa. Coloca un poco de crema en la base del bizcocho, justo lo necesario para pegar las fresas.
14
Corta por la mitad entre 12-15 fresas y colócalas cuidadosamente en las paredes del molde, alineándolas una al lado de la otra.
15
Rellena la tarta con fresas enteras.
16
Cubre toda la tarta con la crema muselina, reservando un poco para el mazapán. Golpea el molde suavemente contra la mesa para asentar la crema y evitar burbujas. Luego, alisar la superficie de la crema con una espátula. ¿Qué te parece hasta ahora la tarta fraisier con crema muselina y mermelada de fresa?
17
Cubre la tarta con la otra mitad del bizcocho, presiona ligeramente con las manos y empapa bien con el resto del almíbar. Deja enfriar la tarta en la nevera durante al menos 4 horas, o mejor de un día para otro para que cuaje correctamente.
18
Finalmente, elabora el mazapán. En un bol, combina almendra molida, azúcar glass y dos cucharadas de miel. Mezcla bien, primero con una cuchara de madera y luego con las manos. Si es necesario, añade una cucharada extra de miel, hasta obtener una textura similar a la plastilina.
19
Una vez alcanzada la textura deseada, incorpora el colorante, buscando un rojo intenso como el de las fresas. Mezcla bien con las manos.
20
Coloca la masa de mazapán entre dos papeles de horno y aplana con un rodillo hasta obtener una capa fina y circular.
21
Retira el papel superior de la masa de mazapán. Luego, saca la tarta fraisier de la nevera y desmóldala con cuidado, sin retirar el papel aún. Usa el molde de la tarta para cortar un círculo de mazapán que se ajuste a la tarta.
22
Ahora, con ayuda de una espátula, aplica un poco de crema muselina sobre la parte superior de la tarta. Solo necesitas la cantidad suficiente para que el círculo de mazapán se adhiera.
23
Retira el papel de horno que rodea la tarta fraisier y, con mucho cuidado, coloca el círculo de mazapán encima de la tarta.
Consejo: te será más fácil si recortas un poco del papel donde está el círculo y lo vuelcas sobre la tarta.
24
Puedes dejar la tarta tal como está o agregar tres fresas en la parte superior como decoración. También puedes decorarla a tu gusto, como nosotros hicimos, con líneas finas de chocolate blanco fundido, unos merengues blancos pequeños y algunas florecitas elaboradas con los restos de mazapán.
25
Reserva en la nevera hasta el momento de servir. Consume tu tarta fraisier lo antes posible, idealmente dentro de tres días tras su preparación. ¿Qué te ha parecido esta tarta francesa de fresas? Déjanos tus comentarios.
Espero que te haya gustado esta receta y te invito a visitar mi blog Cakes para ti.
Historia de la tarta fraisier
Como se mencionó anteriormente, el origen de esta tarta se encuentra en Francia. Ganó popularidad en la pastelería Lenôtre alrededor de 1860, en la misma época que se creó la tarta ópera. Con el tiempo, han surgido diversas versiones, como la tarta fraisier de chocolate negro o blanco y la tarta fraisier de nata.
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Valor nutricional
(por comensal)
- Calorías: 1,115 kcal
- Proteínas: 14,2 g
- Grasas: 66,7 g
- Carbohidratos: 12 g
- Fibra: 3,7 g
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