¿Quieres una tarta refrescante, fácil y dulce? Te la tengo. Muchísimas personas optan por buscar recetas de pasteles de piña, pues son frescas, cremosas y ácidas y dulces al mismo tiempo, ¡Son perfectas! Pero muchos se cohíben de ir a sus cocinas y realizarlas pues no tienen mucho tiempo y hacer un pastel de piña sin horno suena a “especialidad complicada” y suele asociarse a palabras como “volcar moldes con cuidado” o “integrar con equilibrio perfecto pues se trata de ácidos”
Hoy te mostraremos que no todas las recetas son difíciles, que incluso es posible tener un pastel perfecto de piña SIN HORNO que te permitirá disfrutar de tus días de descanso e indulgencia en la compañía del agradable sabor cítrico que buscas
¡Espero disfrutes de la receta!
INGREDIENTES
- 1 lata de piña en rodajas
- Jugo de piña
- 250 gr. De queso mascarpone
- 500 ml. de nata para montar o crema de leche
- 80 gr. de azúcar blanco
- Biscochos de soletilla (11 unds. o según el molde)
- Cerezas para decorar
PREPARACIÓN
Si diseccionamos la preparación, podríamos decir que el pastel de piña sin horno tiene 3 partes sencillas: la crema, la base y la presentación. Vamos paso a paso:
LA CREMA
- Primero hagamos un sencillo puré: En una licuadora coloca la mitad de la lata de piñas en rodajas con un poco de jugo de piña y licúalas hasta que tomen consistencia. ¿Listo? Ahora resérvalo pues lo vas a utilizar más adelante
- En un bowl coloca el queso mascarpone con el queso crema o la crema para montar; cuando estén bien integrados, agrega el azúcar y mézclalos hasta que tengan una consistencia cremosa. (Ten paciencia puede tomar algo de tiempo)
- Agrega el puré que tenías reservado a la crema que elaboraste y mézclalo con una paleta
Te recomendamos ver la deliciosa receta de COMO PREPARAR BROWNIES (receta súper fácil)
LA BASE
- ¿Alguna vez has comido tiramisú? El secreto del por qué su base es tan deliciosa, es que se hace con biscochos y estos se sumergen en la deliciosa y descara mezcla líquida que realza sus sabores; aquí haremos lo mismo: tomaras un molde y dentro de él agregaras los biscochos, uno acoplado al lado del otro, hasta cubrir la base, ESO SI, primero tomaras los biscochos y los sumergirás en jugo de piña (la esencia de la tarta, recuérdalo, así reforzaras su sabor)
- Sobre la base que armaste, vierte la crema que tenías reservada; distribuye completamente y de forma pareja.
- Llévala a la nevera por unas 6 horas
LA PRESENTACIÓN
- Toma la mitad de la lata de piña que te quedaba y coloca las rodajas en la parte superior de tu crema, una al lado de la otra. Ahora coloca las cerezas en los orificios centrales de las piñas.
- Retira del molde y ¡sirve!
¿Y si le pones migas de galletas y crema batida como topping?
Fácil ¿no? Si te gustan las frutas tropicales como esta, también podrías incluir unas cuantas más, ¿no crees? ¿Quizás unas fresas no quedarían mal? Vaya a donde vaya tu creatividad, ¡te animo a experimentar!
¿Necesitas un poco más de ayuda? ¡Ve el vídeo y Disfruta de tu pastel de piña sin horno!
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